Se suceden los estudios científicos que relacionan la microbiota, su estado, abundancia o tipología, con enfermedades, y en particular enfermedades neurológicas.
En este caso el turno es para el autismo. Una dolencia que en realidad tiene una denominación mucho más general que es Trastornos del Espectro Autista (TEA).
Esto es debido a la gran variedad de grados y tipologías diferentes de dolencias que cursan con algunas características en común, o más bien, con algunas de una serie de características agrupadas bajo este trastorno.
Cada vez podemos ver más casos diagnosticados, no sólo en niños sino también tardíamente en adultos. No se trata de una enfermedad adquirida, sino de una condición congénita.
No me gustan estos términos vinculados a la enfermedad. Prefiero hablar de trastorno o condición, sabiendo que es una anomalía incapacitante parcial o totalmente para tener una vida autónoma.
En algunos casos, como los diagnosticados en adultos, esta incapacitación no tiene por qué ser evidente o siquiera producirse y por eso muchos casos son denominados como “neuroatípicos” o “neurodivergentes” y no tanto como TEA aunque en este caso se incluye el espectro de Trastornos por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).
Quede claro que no soy un experto en el tema y pido disculpas de antemano si he cometido algún error en esta explicación.
Para saber más
Antecedentes
Si quieres saber más sobre los trastornos TEA te recomiendo la web de la Confederación Autismo España. Para saber más sobre microbiota y enfermedades permanece atento a hombredecimo.com y apúntate a la newsletter.
Por qué es importante
¿Te imaginas que una parte importante de tu salud dependiera de tomarte todos los días por la mañana una cápsula de probióticos o de microbiota personalizada sólo para ti?
Sin llegar a esto, puede ser que un estudio de tu microbiota en el futuro te aconseje determinados alimentos y te desaconseje otros.
Siguiente paso
Estamos sólo al principio constatando la relación entre la microbiota y la salud. Queda mucho por recorrer hasta que entendamos esas relaciones y las utilicemos para prevenir y curar enfermedades.
