El almacenamiento energético es necesario si queremos tener una generación 100% renovable. El motivo es sencillo: el sol y el viento están cuando quieren y no siempre que los necesitamos. Según el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) que ha sido revisado el pasado julio de 2023, España debería disponer de 20GW de potencia de almacenamiento energético para el año 2030.
Actualmente dispone de 3GW de potencia de almacenamiento.
El resto hay que conseguirla a base de almacenamiento en baterías, almacenamiento térmico (a base de sales fundidas), aire comprimido, hidrógeno, y principalmente en centrales hidroeléctricas reversibles.
Esto quiere decir que las centrales hidroeléctricas por la noche con excedentes de energía bombean agua cauce arriba para utilizarla posteriormente para producir energía de nuevo.
Este proceso genera más energía de la que consume: se estima un rendimiento entre el 70% y 80%. Si no fuera así, lo de excedente de energía sería una farsa mientras haya fuentes de energía no renovables activas.
En la práctica, la casi totalidad de la energía almacenada en esta fase del PNIEC se apuesta a las centrales hidroeléctricas reversibles por motivos sencillos: el resto de los sistemas no son viables a gran escala o están en pruebas.
Pues bien, el pasado 20 de julio el IDAE (Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético), aprobó ayudas para construir estas centrales.
A razón de 50 millones de euros (máximo), por cada central, a cuenta de fondos europeos.
Cuatro días después de publicarlo tuvieron que corregir el texto para indicar que hasta el 2026 se podían hacer las inversiones correspondientes.
El pasado 5 de octubre volvieron a rectificar la publicación indicando que el plazo para la presentación de propuestas a estas ayudas se ampliaba un par de semanas.
Conclusión: hay un montón de personas que han estado corriendo como pollos sin cabeza para poder llegar a tiempo y justificar los proyectos de las centrales hidroeléctricas.
¿Por qué estas prisas? Probablemente para poder usar fondos europeos. Probablemente no esperaban que todo se pusiera en marcha antes del pasado verano.
¿Por qué comento esta información? Pues porque en el próximo contenido te voy a hablar de diversos pasos que indican que una de las fuentes de almacenamiento de energía va a estar en forma de hidrógeno. Al menos, eso es lo que creo yo.
En el próximo contenido te hablaré de los movimientos que se están produciendo alrededor del hidrógeno.
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Ignacio de Miguel
